El
alumno del Colegio Concertado La Presentación , de Málaga, activo defensor de la
educación en libertad, estudiará en Madrid Derecho y Relaciones Internacionales
tras su nota de 9,938 en selectividad.
Ignacio
Castro Anguita, alumno de La
Presentación desde Educación Infantil, ha cursado con
excelencia todos los niveles educativos y habla inglés (C1) y francés (B2).
UN
ESTUDIANTE DEL COLEGIO LA PRESENTACIÓN, DE MÁLAGA, CONSIGUE LA MEJOR NOTA DE
SELECTIVIDAD
Este
año la calificación más alta de la temida Selectividad ha sido 9,938, correspondiente
a las pruebas realizadas por Ignacio Castro Anguita, alumno del Colegio
Concertado La Presentación. Este resultado no ha sorprendido a nadie en esa
comunidad educativa que precisamente este año cumple el 80º aniversario en
nuestra ciudad.
Los
hermanos Castro Anguita –Ignacio y Rocío, mellizos e igual de brillantes- son
alumnos de La Presentación desde los 3 años y han cursado con excelencia todos los
niveles educativos.
La
estructura que actualmente presenta la Prueba de Acceso a la Universidad
contiene una fase general y otra específica, considerándose la primera de ellas
como la selectividad, que se califica sobre 10 puntos y promedia con la nota de
todo el Bachillerato (en una relación de 60% bachillerato / 40% selectividad).
Ante
la sorpresa generada por el tratamiento informativo dado a los resultados de la
Selectividad en nuestra provincia, charlamos con Ignacio en el propio centro el
día después de conocerse las calificaciones.
Llama la atención que
sin haber cursado estudios en el extranjero domines dos idiomas… Ignacio
sonríe.
Me
gustan los idiomas, además internet es una gran ayuda para la pronunciación.
Es
a partir de 3º de ESO cuando se van perfilando sus centros de interés, según
declara; los temas de actualidad y las lenguas. Sin embargo la Historia le
entusiasma, disciplina que cuenta con larga tradición familiar ya que su abuelo
materno, profesor de Historia, parece haberles transmitido esta pasión. En el
examen de Historia de Selectividad cada hermano eligió una opción distinta, uno
la Constitución de 1812 y otra la del 78, pero los dos con idéntico resultado,
10.00.
Interesado
por el futuro de Europa, sus instituciones y proyectos, le gustaría ver una España
normalizada y más europea, sin exclusiones; que dé oportunidades a los jóvenes para
ser competitivos en el mundo y mejorar la situación actual.
Debe
fomentarse más el conocimiento, así como recuperar la cultura del esfuerzo y el
espíritu de sacrificio; considera que actualmente la ideología está
sobrevalorada en los estudiantes.
Ignacio, que en todo este tiempo nunca
ha sido delegado de sus compañeros, considera clave la importancia del colegio
y el trato directo del profesorado para atender la diversidad de necesidades personales
que se concentran en el aula. El sistema de enseñanza debe motivar a los
estudiantes y despertar en ellos la ambición por descubrir e investigar.
Aprender, no memorizar; sobre todo desarrollar los temas de manera creativa,
original; fue lo que hizo en su examen de Historia del siglo XIX.
Para el horizonte que ahora se abre, la familia ha sido fundamental; Ignacio Castro no sabe aún a qué se va a dedicar y, haciendo un guiño a Sócrates, manifiesta que solo tiene claro que le falta mucho por aprender.